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dissabte, 15 de desembre del 2007

Genio y Figura




Eran las nueve y media de la noche del cuatro de noviembre de 1993 cuando, sentado en la primera fila de la platea del Palau de la Música de Barcelona, fui abducido y transportado a otro mundo, donde el tiempo se detenía o corría a raudales, al antojo de unas manos maravillosas que pertenecían por completo al genio musical de Stéphane Grappelli , quien se valía de su arte con el violín para transportar a los más de dos mil fervorosos escuchantes a un universo de sensaciones etéreas que arrancaban sin cesar exclamaciones de admiración e interminables aplausos.

El genio, ya con ochenta y cinco años a cuestas, demostró una vitalidad envidiable y un sentido del ritmo y del tempo musical verdaderamente alucinantes, y no exagero ni pizca.

Aquí se le puede ver, dos años antes en Varsovia, tocando How High The Moon



Grapelli nació en 1908 y falleció hace ahora diez años, en diciembre de 1997, dejando un legado de grabaciones estimable, incluso, por suerte, grabaciones en video de sus actuaciones.

Con su mágico violín, interpretó de forma inigualable piezas de jazz desde que empezó con Django Reinhard con el Hot Quintet y luego se prodigó, por suerte, con multitud de músicos en conciertos en directo que hacían levitar al público.

Fue un intérprete de jazz puro, capaz de enfrentar su arte a los mejores de una larga época, siempre versionando en clave de jazz con un fraseo ejemplar muchísimas canciones; veamos por ejemplo, su mezcla de Gershwin .

En los 80, colaboró con un violinista clásico como Yehudi Menuhin, con resultados magníficos, pese a la distinta formación académica de ambos: ejemplo de ello es esta versión de Jealousy

También se avino a tocar con gente mucho más joven que él, como Martin Taylor, con quien interpreta Blue Moon

Y generosamente, pasando el testigo como violinista de jazz a Didier Lockwood, con quien ejecuta este Tiger Rag

La vejez no asustó a Grapelli: está claro; tanto, que incluso en silla de ruedas, actuó, poco antes de fallecer, ofreciendo una de sus últimas actuaciones, interpretando S'Wonderful & Someone To Watch Over Me & I Got Rhythm

Hay gente que nunca muere: permanecen en el recuerdo imborrable de una noche especial, muy especial.


7 comentaris :

  1. Pues no es que me pueda considerar, compa Josep, un conocedor ni siquiera somero de la música de Grappelli, al que sólo he oído a rafagas radiofónicas en alguna ocasión, pero sí que me ha resultado siempre muy simpático su estilo, la vitalidad alegre que desprende su violín. Lamentablemente, jamás pasé de ahí a profundizar en sus grabaciones, pero, en fin, son carencias que habrá que ir solventando. Desgraciadamente él ya no está; pero, afortunadamente, ahí estás tú, para marcarme el camino...

    Un abrazo (y buena semana, que ésta sí que es prenavideña de verdad...).

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  2. Amigo Manuel, precisamente la vitalidad de Grappelli era lo más sorprendente, atendida su edad: un espíritu joven encerrado en un cuerpo anciano, que desbordaba energía a través de su violín.

    Vale la pena oirlo de vez en cuando: aún en grabaciones, sigue levantando el ánimo.

    Un abrazo y gracias por la visita y el comentario.

    (Y cuidadín con los turrones, o luego deberás hacer doble sesión de trote.)

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  3. OOoooh, ¡qué grande! Descubrí a Grappelli (creo) en last.fm, buscando artistas similares a Reinhardt. Me encanta lo que decís, su vitalidad. Por cierto, o tocaba, o colaboró, o eran amigos o lo que sea con Joe Venuti, otro genio.

    Com prefieres que escriguem? En catalán o en castellà? ;)

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  4. Hola, Joan: benvingut.

    Puedes escribir en català o en castellano, como prefieras: te responderé igual. :-)

    Pues reconozco que no conocía a Joe Venuti, así que ésa te la debo.

    No me extrañaría que hubiesen coincidido: Grappelli colaboró con muchísima gente; tengo por ahí un disco con el gran Baden Powell, guitarrista brasileiro.

    Gracias por la visita y por el enlace, que correspondo igual.

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  5. Me apunto lo de Powell y también como visitante habitual.

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  6. S'WONDERFUL....¡ Delicioso éste descubrimiento ! Un violinista que no está sobre el tejado pero sí en el cielo ¡ seguro !.Virtuosismo y momento maravilloso...

    Algunos videos ya no están pero los que he podido disfrutar y descubrir han sido
    una " gozada ".

    ¡ Gracias, ahora ya puedo añadirlo a mi playlist !

    Un beso. Milady

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  7. Me alegro muchísimo, Milady, de haber contribuído al conocimiento de Grapelli, con toda seguridad el más grande violinista de jazz que ha habido: y si buceas en youtube -y no lo han borrado- puede que halles un vídeo en el que el propio Yehudi Menuhin asegura que Stéphan era un violinista excepcional, del que soy admirador hace años, así que lo descubrí en su Lp con Baden Powell.

    Besos.

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