TC 37 TRUE GRIT (2010)
People do not give it credence that a young girl could leave home and go off in the wintertime to avenge her father's blood.
But it did happen.
I was just 14 years of age when a coward by the name of Tom Chaney shot my father down and robbed him of his life and his horse and two California gold pieces that he carried in his trouser band. Chaney was a hired man and Papa had taken him up to Fort Smith to help lead back a string of Mustang ponies he'd bought. In town, Chaney had fallen to drink and cards and lost all his money.
He got it into his head he was being cheated and went back to the boarding house for his Henry rifle.
When Papa tried to intervene, Chaney shot him.
Chaney fled.
He could have walked his horse, for not a soul in that city could be bothered to give chase.
No doubt Chaney fancied himself scot-free.
But he was wrong.
You must pay for everything in this world, one way and another.
There is nothing free, except the grace of God.
(ventana más grande)
Desde que la ví quedé impresionado por esa forma tan bella, eficaz y económica de presentar unos antecedentes informando al espectador de todo aquello que precisa para poder prestar atención a lo que va a suceder en pantalla.
Eso sí es entrar en materia.
El uso de la quietud visual acrecenta la atención al discurso pronunciado en off por Elizabeth Marvel que flota sobre las notas del tradicional himno Leaning on the everlasting arms que sirvió a Carter Burwell para realizar una serie de expresivas variaciones adecuadas a cada momento de la trama.
Del resto, ya lo comentamos en su día, aquí.
Lo que bien empieza, bien acaba, dice el pueblo. No podíamos quedarnos sin los debidos créditos al cierre:
(ventana más grande)
Buenos días.
ResponEliminaDesde luego les salió mejor que la última de ¡Ave, César! que, quitando la escena de debate sobre el guión entre los religiosos (me reí mucho) y la escena del vaquero en una comedia de alto standing (me reí muchísimo; a carcajada), el número musical, y alguna otra cosa, flojea bastante y no termina muy allá.
Un saludito.
Pues no lo sé, David: eso pertenece a un futuro próximo...
EliminaUn abrazo.
No sé si esta entrada tiene alguna relación ( o se acerca, dime si me equivoco) con la de Hathaway del 69, y por Wayne, del que hablamos estos dias-una cosa lleva a la otra-, que consiguió el Oscar casí de consolación por su carrera y por el parche de Rooster Cogburn y estás comparando los dos filmes como hiciste en la entrada del 2011.
ResponEliminaEn esa ocasión ya dije (lo he leido por si acaso)que me había gustado ésta de los Coen y que los actores están muy bien, la niña, Jeff Bridges, Matt Damon..el tono, más oscuro y sin la comicidad que tiene la de Hathaway que en su día me gustó y que en una revisión reciente no me ha decepcionado tanto como podía esperarse, y sin dejar de apreciar esta revisión "tan clásica" del 2010, me quedo con Wayne por "lealtad" y ¡mira que me gusta Jeff Bridges más que comer con los dedos! ;D
Que la niña te gusta más, vale. Que ese inicio es muy bueno, bien aprovechado para ésta sección tambien. Y lo del guión..se lo dejo a los "expertos".
Y te dejo el enlace -que ya conoces- por si sirve de recuerdo de lo dicho como has hecho con el tuyo (formidable como siempre) aqui en mi casa, perdón por la publicidad de mi espacio, es por no repetirme más aquí.
Besos. Milady
De hecho no, Milady: en relación con tu entrada está una revisión en v.o.s.e. de ¡Hatari! pero no aquella película que la industria aprovechó para dar al Duke la estatuilla que tantas veces le negaron.
EliminaYo me sigo quedando con la versión de los Coen, en v.o.s.e., por supuesto.
Besos.
yo entono el mea culpa...sobre esta ya hablamos y el comienzo es magistral...pero en el blog de Abril dije que la versión anterior la veía rutinaria y con tópicos, un tanto mediocre sin estar mal. Como no tengo palabra, me corrijo a mi mismo pues la he visto de nuevo y me parece una pelicula interesante, incluida la interpretación de Wayne....si es que no tengo criterio, hoy digo una cosa, mañana otra...
ResponEliminaSobre esta no muevo nada de lo que dije....un abrazo
Lo de cambiar de opinión, Víctor, es síntoma del tiempo: del tiempo necesario para contemplar las cosas de una forma distinta. En este caso no mejor, claro, porque sigo pensando que la segunda es mejor que la primera.
EliminaQuizás aprovechando que el domingo próximo la "echan" por TV1, muy dobladita eso sí, le das otro vistazo y hallas detalles que te gusten: y eso no hay que imputarlo a la falta de criterio sino a la madurez del mismo: a mí, por ejemplo, antes no me gustaban los melodramas y ahora incluso alguno me parece una película soberbia...
Un abrazo.