MM 89 CAPRI
En este caso, es preferible usar el título español,Capri , más adecuado que el penoso original It started in Naples para referirnos a una comedia sencilla con algunas pequeñas puyas que apenas alcanzan la categoría de sarcásticas, aunque lo intentan, basándose en la distinta forma de afrontar la vida entre unos y otros.
Estamos a finales de los años cincuenta del siglo pasado. Michael Hamilton es un abogado estadounidense que viaja desde Filadelfia hasta Nápoles con el objetivo de arreglar los asuntos pendientes por causa del fallecimiento de su hermano, al que él mismo recuerda como la oveja negra de la familia.
Mientras se desplaza desde Roma a Nápoles en tren, su voz en off nos cuenta que ya estuvo en Italia con motivo de la guerra y manifiesta poca confianza en los italianos, prestos, asegura, a engañarle. Y mucho ojo con beber agua del grifo y apenas la embotellada.
Lleno de los prejuicios acostumbrados en los arrogantes yanquies, se encuentra con un colega, el avocatto Vitale, encargado de las gestiones, quien le informa que su hermano -que deja viuda en Filadelfia- estaba aparejado con una italiana, que falleció junto a él, en un accidente de navegación, cabe la isla de Capri, donde residían, no en Nápoles.
Mr. Hamilton, atónito, asegura que su hermano no podía tener otra mujer, y Vitale le asegura que hay una prueba viva, un chaval, Nando, que vive con su tía en Capri, naturalmente.
Cuando el incrédulo Mr. Hamilton llega a Capri, se encuentra a su sobrino y acaba por descubrir en qué trabaja su cuñada:
Más allá de la curiosidad de ver a una veinteañera Sophia Loren cantando y moviéndose con cierta gracia en la penúltima película de Clark Gable con la compañía de un jocoso Vittorio De Sica y el centro ocupado por un asombroso Marietto que vocaliza muy bien en inglés, nos encontramos con una película más que aceptable, rodada sin alardes, centrándose la labor de Melville Shavelson en presentar su propio guión de la forma más económica posible, sin complicarse la vida, dedicando más atención a la dirección de actores que a otra cosa.
Porque la gracia está en el guión, en la burla nada soterrada de los prejuicios del estadounidense que mira un poco por encima del hombro a los italianos y el ajuste de cuentas lo realiza Shavelson mediante réplicas afiladas que ahora quizás podrían parecer anticuadas pero que sin duda, en 1960 debían chocar bastante con la concepción que del mundo tenía el estadounidense medio, el que conformaba la gran mayoría. Si lo pensamos dos veces, igual hallaríamos demasiadas similitudes.
Eso sí: el guión, como aquellos añorados de hace tanto tiempo ya, necesita atención, aún siendo muy evidente. Mr. Hamilton, que se halla en puertas de su boda, consigue conectar telefónicamente con su prometida, que se extraña de la música que percibe: él le dice que están dando un concierto en la calle y ella inmediatamente, conociendo el pasado de él, insiste en que la llama desde un bar, y cuelga. Él, vencido por los hechos, ya que no puede dormir, se sienta en la plaza, cabe una mesa de un bar y le pregunta al camarero que le atiende:
-Oiga, ya es la una de la madrugada y no para la música. ¿Cómo duerme la gente de este pueblo?
-El camarero le muestra con la mirada todas las mesas llenas de parejas amarteladas y le dice: ¡Juntos, señor!¡Esto es Capri!
O detalles como el del taxista que, escuchando lo que dice Mr. Hamilton a unos vecinos, le tira su maleta al suelo y lo deja plantado. Un desprecio por el dinero que choca frontalmente con la forma de pensar del asombrado Miki, como le llama su sobrino.
Quizás si Shavelson hubiera cargado las tintas en el guión y en la presentación visual buscando más mordacidad y crítica ahora sería más conocida.
El caso es que, rodada en Capri, con todos los componentes del elenco italianos pero declamando en un muy correcto inglés, únicamente el detalle del idioma y la presencia de Gable como estrella hacen pensar en el público estadounidense como objetivo, cuando por todo lo demás, podría muy bien ser una comedia italiana tan vitalista como aquellas en las que De Sica y la Loren ganaron buena fama y popularidad.
Por todo ello, si se les presenta la oportunidad, no la rechacen.
Hace unos años se popularizó un poco el tema del primer vídeo. Salía hasta en la peli esa de El talento de Ripley https://www.youtube.com/watch?v=MXtxR1gHZIk... pues bien, yo lo recordaba porque vi esta película de niño...y me quedé con la cancioncita. Me quedé durante años y recuerdo que algu9na vez tarareaba la canción (que creo que escuché doblada) y sabía de qué peli era. Pero no he vuelto a ver esta peli. Si cae, no la rechazaré.
ResponEliminaY recomendación por recomendación.
Hace nada revisé Bola de fuego de Hawks (bueno, guión de Brackett y Wilder).
Pues bien, después revisé la otra versión que sobre un otro cláisco de los cuentos de hadas realizaon los guonistas y casi diría que me gustó más.
Medianoche, de Mitchell Leisen...que no era tan mal director como Wilder dejó escrito (más allá de que no siguiera su guión al pie de la letra). Muy entretenida. No es Lubistch, pero se ve con mucho agrado (en parte por el guión de Bracket y Wilder, claro). "Adelante mi amor", del mismo equipo, no me gustó tanto.
Buenos días.
La canción esa, David, la recuerdo de haberla escuchado por su autor, Renato Carosone, en la radio de mi infancia y luego en los bailes populares de la fiesta mayor. La película ha sido un descubrimiento, por la curiosidad iniciada al ver a Sophia cantando en youtube y luego la casualidad de verla.
EliminaLeisen es un repasito pendiente; tengo tres dvd comprados a saldos: Medianoche, Afortunada y Candidata a millonaria, pero ahora mismo no sé por donde andan, porque tengo mśa dvd que estanterías y unos están delante de otros y todavía no he hallado un orden que me satisfaga.
O sea que cualquier día aparece alguna por aquí.
Un abrazo.
Ah! La peli de Ripley no la he visto.
ResponEliminaYo tampoco. Tengo el dvd y la novela de la Higsmith uno al lado del otro. Deberá esperar, porque tengo empezada Carol, después de haber visto la película...
EliminaOtro abrazo.
Bonita pelicula
ResponEliminaSí que lo es, Teresa. Gracias por participar.
EliminaSaludos.
Mi querido Josep, tenemos que quedar ya. Hay mucho de qué hablar, mucho cine, sobre todo, mucho cine. Esta película la tenía "casi" olvidada, pero no del todo, que a uno el cine le gusta horrores. Década de los sesenta... época mágica para mí y para "mí cine". Te cuento. Hoy vuelvo a visitar películas como "Anónimo veneciano", gran banda sonora, tan mítica como "Un hombre y una mujer", que luego saldría en esa gran obra del olvidado y grande Adolfo Marsillach en "Yo me bajo en la próxima, ¿y usted?". Veo esa película y me fijo en la profundidad de campo, es decir, cuando la pareja está hablando y a lo lejos se ve el Gran Canal, ¡y no se ve la masificación de vaporettos y otras embarcaciones! La ciudad está tan vacía de turistas como esa Venecia de "Muerte en Venecia". En fin, que aquí, en esta película que hoy rescatas para la memoria de todos los que te seguimos, vemos Nápoles y Capri antes del boom turístico de los años 60. Recuerdo esta película con el título de "La bahía de los sueños", y también esa fascinación de ver una vieja estrella como Clark Gable con 59 tacos (y en su penúltima película) en una Europa a punto de sufrir un gran cambio. Sophia Loren (antes se decía Sophia) ahora es, simplemente Sofía, con 25 años como pareja de Gable era totalmente inaudito, además del gran Vittorio De Sica. En esa gran época se dio grandes películas donde se ajuntaban viejas glorias americanas con las nuevas europeas en el viejo continente. Lo dicho, quedamos y hablamos de todo esto que es la mar de interesante, mi querido Josep. Recuerdo una escena donde se le acerca un putón al hombre que interpretó "Lo que el viento se llevó", en un club nocturno y se le insinúa. Entonces él dice:
ResponElimina- Lo siento señorita, estoy aquí por negocios.
-Y yo también.
Película de la Paramount. Las nuevas generaciones no me comprendería. Amanecer en Capri. El cine todavía a flor de piel. Melville Shavelson, director totalmente olvidado. Creador de series televisivas, pero también de películas muy interesantes. Ahí tenemos Samantha con Paul Newman y su mujer Joanne Woodward (casi nada). La sombra del gigante, con Kirt Douglas, posiblemente el actor, el hijo del trapero, que mejores películas ha interpretado en la Historia del Cine. El otro día vi Vikingos, que es productor además de actor, simplemente espectacular, muy bien documentada y muy bien dirigida por Richard Fleischer en 1958. Aquí descubrimos que los vikingos no llevaban en el casco cuernos, esa era cosa de los celtas. Otra película de este director: Guerra entre hombres y mujeres, con Jack Lemmon, mi actor favorito de siempre, por aquello de El apartamento. Otra: Tu mano en la mía con Danny Kaye, pero esta película me gustó por el simple placer de ver a mi músico favorito: Louis Armstrong... Aventura en Roma con Charton Heston... Cintia con Cary Grant y Sophia (Sofía) Loren, otra rareza de ver un clásico de Hollywood con esa italiana de boca y tetas que...
Ejem... quedamos... el cine es demasiado grande para quedar en un simple carraspeo.
Un fuerte abrazo, querido amigo.
Tienes toda la razón, Paco, amigo mío: esto no se puede arreglar con cuatro palabras, porque hay mucha tela que cortar: me encanta tu aportación al escenario insólito en la actualidad de una Capri transitable, con unos viajeros más que turistas (tú conoces muy bien la diferencia) que sin abarrotar se entremezclan con los naturales del país. Ese yanquie incorporado por Gable se va asombrando hasta caer en la cuenta que algo tenía mal enfocado en su planteamiento vital.
EliminaEsas soledades de Anonimo Veneciano con una inolvidable Florinda Bolkan absolutamente presente son una muestra que muchos contemplarían, si tuviesen ocasión, sin acabar de creerlo, porque esos paisajes han acabado desnaturalizados, igual que las películas que ahora se ciernen sobre ellos: me viene a la memoria ahora la tontería de Spectra presentando una fiesta mexicana inexistente que ha acabado provocando la consideración de celebrarla porque los turistas preguntaban en las agencias que cuando podían ir a Mexico para asistir. De locos, amigo: el mundo al revés. Quizás por eso siento -sentimos- una complacencia y tranquilidad al regresar a esas películas de hace tanto tiempo, que no fue mejor, pero desde luego no tan raro. De acuerdo contigo.
Un abrazo.
Esta vez sí he visto la pelicula con Sofia y un madurito Gable...y me parece recordar (corrígeme si me equivoco) en ésta casa ya ha aparecido éste video de Capri con el famoso tema de Renato Carosone "Tu vuò fa L'americano" que con el estreno de El talento de Mr. Riplyse puso de moda ( me da que incluso lo usaron para un anuncio ).
ResponEliminaPor mencionarlo, tambien he visto la de Riply, revisión de "A pleno sol" con Alan Delon, el papel que Matt Damon interpreta bien pero sin el morbo del francés. La novela está igualmente en mi estantería, leída hace tiempo... (he hecho los deberes) ;)
Y tienes razón, Capri es una comedia muy agradable de ver (la vi en la tele, claro)... por otra parte a mi todo lo italiano me gusta..me evoca la luz del mediterraneo, playa, canciones y verano, todo muy ligero..muy digestivo. Eso no inluye el neorrealismo, evidentemente, porque esa otra historia.
Besos. Milady
P.D. Aprovecho para decirte que estamos consternados por lo que ha sucedido en Barcelona. Confio en que tanto tú como los tuyos estéis bien.
He buscado y no he hallado, Milady, rastro en este bloc de notas de esa canción antes de ahora: si la tienes localizada, dímelo, porque no recordaba haber visto ése vídeo.
EliminaEsta película desde luego no tiene nada de neorrealista salvo el pícaro Vitale (el nombre define a la perfección al personaje) y además tengo la idea que forma parte del lote "estadounidense" de la Loren, con un contrato que aún tardaría en acabar, con alguna excepción notable: Sophia trabajó en tres años con Cary Grant, Clark Gable y Charlton Heston de pareja de cartel, ahí es nada.
Ya veo que tienes "deberes adelantados", ya.... :-)
Besos.
p.d.: Un desastre. Por suerte, nadie conocido. Gracias.
2Pd.
ResponEliminaEl Talento de Mr."Ripley" (sorry)