Timidez, esa muralla
La timidez se desarrolla de muy variadas formas y alcanza muy diversos estadios de gravedad.
A menudo representa un serio obstáculo en las relaciones interpersonales ya que quien la padece se bloquea y sufre lo indecible hasta que toma una decisión que, para el ajeno a la timidez, representa cuestión de décimas de segundo.
En su acepción más leve, la timidez obstaculiza siempre la interrelación entre personas de distinto sexo y todos hemos oido a muchos actores confesarse como tímidos eternos, lo que, para cualquiera ajeno a la timidez, encierra una contradicción, una paradoja irreal, pero lamentablemente cierta para quien la sufre en silencio.
La explicación de la paradoja es muy simple: el actor recita las palabras de otro y en ello no halla dificultad alguna.
Un día, en una cafetería, Julia queda prendada, súbitamente enamorada, del joven Oliver.
Acosada por su timidez, le sigue hasta la librería donde él trabaja, pero no se decide a expresarse...
Dejemos que el madrileño Iván Sáinz-Pardo nos lo cuente en unas magníficas imágenes:
El Sueño del Caracol (Schneckentraum, 2001)
Extraordinario, Josep. Muy elegante y sutil, una pequeña joya. Y el blanco y negro, soberbio.
ResponEliminaSaludos
Ha sido un afortunado hallazgo, desde luego, 39escalones, y me pregunto porqué ese madrileño ha tenido que irse hasta Alemania par realizar su corto.
ResponEliminaQuizás para poder contar con excelentes profesionales como el rumano Sorin que cuida ese B/N tan delicado.
¿Te has fijado en la mosca?
Saludos.
Como buena tímida que soy, Josep, me he sentido totalmente identificada con la chica, y mira por donde presentía que la cosa podía acabar así, por culpa de esa dichosa muralla, como tú dices. Me había descolocado oir a Amaral, pero ahora ya lo entiendo (aparte de que la canción queda muy bien)
ResponEliminaDe hecho, Alicia, cuando ví ese corto la primera vez, pensé que la canción había inspirado a Sainz-Prado, porque la letra se ajusta como un guante al tema y así quedaría explicado el porqué usarla como fondo de buena parte de la narración, siendo como es en castellano y por lo tanto extraña al idioma usado por los personajes.
ResponEliminaY casi seguro que el director-guionista también es un tímido, pues refleja muy bien esa muralla invisible que atenaza a los protagonistas, ya que Oliver también es un tímido, evidentemente.
¿Te has fijado en la mosca?
Saludos.
Hermosísima forma de contar en imágenes la historia eterna de chica conoce chico. Todos hemos sido tímidos alguna vez y por culpa de ese sentimiento, imposible a veces de superar, probablemente hemos perdido el amigo, la amiga, el amante o la amante de nuestras vidas.
ResponEliminaDe todas formas pienso que la timidez que nos frena en algún momento vital nos abre otra posibilidad a descubrir.
La utilización de los sonidos me parece genial, sobre todo el de las cucharillas batiendo el café.
Un abrazote y goza del "calor" el finde.
Tienes razón en lo de los sonidos, Antonio: a mí me ha sorprendido el de los latidos del corazón de ella cuando se cruzan us miradas en la cafetería y parece hacer ademán de llamarla, cuando llama a la camarera.
ResponEliminaTiene buenos detalles, ese corto: se nota que se lo han trabajado.
¿Te has fijado en la mosca?
Un abrazo y tómatelo con calma el domingo...